44. Si el libro trata sobre el amor de Dios. Nadie leerá ese libro. Solo aquel que tenga sed de amor de Dios lo leerá.
45. Si alguien te pregunta ¿Eres un ángel? Responde: Tú lo has dicho. Cuando te pregunten ¿Eres un demonio? Di: Tú lo has dicho. Si te preguntan: ¿Eres ángel o demonio? Contesta: Soy ángel y demonio... Frente a todo los interrogatorios, permanece sereno como el agua de un lago, que al igual que el espejo, refleja lo que proyectan sobre él.
46. Siéntate a la puerta de tu casa y veras a tu enemigo barrerte la vereda.
47. Miles de años lleva el hombre erigiendo altares y adorando Dioses sin terminar de percatarse que lo sagrado es él. Que la unión con el otro es sagrada, que el sexo es sagrado, y que el erotismo es la presencia de la divinidad.
48. ¿Muchos viven en ti? Muchas serán tus muertes.
49. Abogados, se dice de los que ejercen el derecho, es una pena que no se diga lo mismo de las obligaciones.
50. Las máximas y las frases célebres son a los adultos, lo que las pompas de jabón a los niños.
51. En el libertinaje hay libertad.
52. La lectura es el combustible que hace arder la flama del intelecto.
53. Para una mujer, el hombre es valiente, si se juega por ella; es paciente, si lo es con ella; es generoso, si lo es para con ella. En fin, sabe de manera natural y sin que nadie se lo enseñe, que: “La mujer es la medida del hombre.”
54. En muchos abatidos se encuentra un escéptico. Por lo que si la piedad te mueva a hablarle de Dios a un abatido, prepárate para terminar hablándole a un escéptico.
55. Discute de tal forma, que ganes, cuando los demás tengan razón.
56. Canta como si las vocales fueran caramelos.
57. A la larga lo que perdura es la verdad, por más que estés lleno de mentiras, si te sostienes en una verdad; las mentiras irán cayendo solas.
58. Cuando una persona es realmente inteligente, busca el bien común y no el provecho propio.
59. Poco importa si lo que sostienes en alto es una astilla o un imperio. Lo importante es sostenerlo. Hasta una pequeña astilla, si arde, puede provocar un incendio que devore un imperio.
60. En política el centro no existe, o se es de izquierda o se es de derecha.
61. Políticamente hablando, la izquierda y la derecha no existen. El gobierno defiende los intereses del pueblo, o no los defiende.
62. Desconfía de las personas friolentas, probablemente estén más muertas que vivas.
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