2009/09/25

Hay una verdad clara y profunda,
que sin mostrarse permanece manifiesta.
Los filósofos argumentarla no aciertan.
Reproducirla en sus matraces no puede la ciencia.
Ni el pontífice máximo en su liturgia la encierra.
Acaso Imhotep en sus siete leyes eternas,
logro intuirla, pero no alcanzo a ponerla.
Presta atención oh mortal porque hoy su revelación presencia la Tierra
Y es que: No hay dos sin tres.

Y como no hay dos sin tres ahí va la tercera página de: “Contestaciones a mí mismo”

No hay comentarios:

Publicar un comentario